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Christopher Domínguez Michael

Artes y Letras
Crítico literario
Ingreso: 3 de noviembre de 2017

Un crítico de artes o letras, es aquel que frente a lo que le es antipático, abre los ojos y se obliga a ver o leer

Escritor. Crítico literario y ensayista. Ha publicado más de 2000 artículos de crítica e historia literaria. Algunas de sus obras son La utopía de la hospitalidad (1993), Tiros en el concierto. Literatura mexicana del siglo V (1997), La sabiduría sin promesa. Vida y letras del siglo XX (2001), Vida de fray Servando (2004), Octavio Paz en su siglo (2014 y 2019), La innovación retrógrada (2016) y Retrato, personaje y fantasma (2016). Premio Xavier Villaurrutia 2004 y Premio del Círculo de Críticos de Arte de Chile (2010). Ingresó a El Colegio Nacional el 3 de noviembre de 2017.


Nació en la Ciudad de México el 21 de junio de 1962. En 1980 ingresó a la Universidad Autónoma Metropolitana, Xochimilco a estudiar sociología, pero dificultades familiares le impidieron proseguir sus cursos universitarios.

Es considerado uno de los críticos literarios iberoamericanos más reconocidos. A la fecha, ha publicado más de 2 mil artículos de crítica e historia literaria, un gran número de prólogos y capítulos en libros colectivos y varias compilaciones de literatura mexicana.

A principios de los años ochenta incursionó en la prensa cultural (muy brevemente en Nexos y en El Buscón) y, entre 1983 y 1990, fue reseñista de libros en el semanario Proceso. En 1987, a instancias de Enrique Krauze, subdirector de Vuelta, aparecieron sus primeros artículos en esa revista, de la que fue miembro del consejo de redacción a partir de enero de 1989 y hasta su desaparición en 1998 tras la muerte de Octavio Paz. Hasta la fecha es consejero editorial de su sucesora Letras Libres. Fue columnista político y cultural del periódico Reforma (1993-2015) y actualmente lo es de El Universal. Fue investigador asociado de El Colegio de México (2010-2018). Asimismo, ha impartido numerosos cursos y conferencias en el extranjero sobre historia literaria y crítica literaria latinoamericanas.

Ha publicado Antología de la narrativa mexicana del siglo XX (1989-1990), el Diccionario crítico de literatura mexicana del siglo XX (2007) y con José Luis Martínez La literatura mexicana del siglo XX (1995). Ha hecho historia literaria mexicana del siglo XIX: La innovación retrógrada. Literatura mexicana, 1805-1863 (2016); y del XX: Jorge Cuesta y el demonio de la política (1986), Tiros en el concierto. Literatura mexicana del siglo V (1997) y Servidumbre y grandeza de la vida literaria (1998), además de las biografías Vida de fray Servando (2004) y Octavio Paz en su siglo (2014 y 2019). Sobre literatura universal decimonónica y moderna ha publicado La utopía de la hospitalidad (1993), Toda suerte de libros paganos (2001), La sabiduría sin promesa. Vida y letras del siglo XX (2001 y 2009), Jorge Luis Borges (2010), Los decimonónicos (2012) y Retrato, personaje y fantasma (2016). También ha publicado novela: William Pescador (1998). Sus libros más recientes son Bolaño, Benjamin, Walser: três ensaios (2017; en portugués), Ensayos reunidos. 1984-1998 (2020) y Ateos, esnobs y otras ruinas (2020).

Ha recibido diversos reconocimientos como el Premio Guillermo Rousset Banda 1997, el Premio Xavier Villaurrutia 2004, la beca Guggenheim 2006, el Premio del Círculo de Críticos de Arte de Chile 2010 a la mejor obra literaria de 2009. De 2013 a 2014 fue profesor visitante en la Universidad de Chicago con la beca Tinker y en 2017 obtuvo la residencia Edmundo O’Gorman en la Universidad de Columbia en Nueva York. Fue miembro del Sistema Nacional de Creadores del Fonca hasta octubre de 2017.

Christopher Domínguez Michael ingresó a El Colegio Nacional el 3 de noviembre de 2017. Su discurso de ingreso “¿Qué es un crítico literario?” fue contestado por Enrique Krauze Kleinbort.

¿Qué es un crítico literario?
Discurso de ingreso (3 de noviembre de 2017)

Agradezco esta noche a todos aquellos que hicieron posible, con su simpatía hacia mi obra, la elección que me ha convertido en miembro de El Colegio Nacional y saludo también, con gratitud, a quienes me honran con su presencia en esta lección inaugural. Quisiera, como lo dicta el canon, empezar por recordar a aquellos miembros de El Colegio Nacional, ya fallecidos, que tuvieron una presencia —unas veces honda, otras fugaz— en mi educación sentimental, pues no otra cosa es para mí la formación intelectual.

 


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