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Inicio / Nuestros Integrantes / Leonardo López Luján

Nació en la Ciudad de México el 31 de marzo de 1964. Es arqueólogo por la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y doctor en la misma materia por la Universidad de París Nanterre.

Sus investigaciones se han centrado principalmente en la política, la religión y el arte de las sociedades prehispánicas del centro de México. En ese campo ha hecho aportaciones que versan sobre las estrategias indígenas de recuperación del pasado remoto, el lenguaje codificado de los depósitos rituales, las funciones y el simbolismo de la arquitectura religiosa, los usos y el significado de la plástica mexica, la ciencia de materiales aplicada al estudio del arte prehispánico, las actividades iconoclastas en periodos de crisis, las dimensiones políticas de la figura panmesoamericana de la Serpiente Emplumada, los cultos a las diosas madres y las prácticas sacrificiales, entre otras. También ha incursionado en la historia de la ciencia en México, específicamente de la arqueología, en el que ha alcanzado significativos avances en el estudio de sus orígenes y desarrollo de los siglos XVIII y XIX.

Desde los ocho años participó en diversos proyectos arqueológicos, antropológicos e históricos en las entidades mexicanas de Campeche, Chiapas, Distrito Federal, Guanajuato, Estado de México, Morelos y Quintana Roo, así como en los Andes ecuatorianos. A lo largo de su carrera ha sido investigador huésped del Museo del Hombre de París y de las universidades norteamericanas de Princeton y Harvard, además de profesor invitado de la Sorbona y la Escuela Práctica de Altos Estudios de París, la Sapienza de Roma y la Universidad Francisco Marroquín de Guatemala. Desde 1980 es miembro del Proyecto Templo Mayor del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y su director a partir de 1991. Actualmente ocupa los cargos de profesor investigador titular C del Museo del Templo Mayor y de profesor de asignatura en la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía, ambos del INAH.

Es el único latinoamericano que ha dictado la conferencia inaugural de la reunión anual del College Art Association, el cual reúne más de 15 mil agremiados en el área de las artes y la historia del arte. De manera significativa, ha sido invitado como orador distinguido por las universidades de Cambridge, Harvard, Stanford, Berkeley, Brown, Missouri, Wellesley, Dumbarton Oaks, así como por el Museo Británico de Londres, el Musée du Quai Branly de París, el Museo De Young de San Francisco, el Museo de Arte de San Antonio, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos, el Foro Arqueológico de Shanghái y el Gran Teatro Nacional del Perú. Asimismo, ha sido ponente en numerosas instituciones académicas de todo el continente americano, Europa, China y Japón.

Ha sido curador de las exposiciones “The Aztec World” en el Museo Field de Chicago, “Moctezuma: Aztec Ruler” en el Museo Británico de Londres, “El capitán Dupaix y su álbum arqueológico de 1794” en el Museo Nacional de Antropología, así como “Camino al Mictlan”, “La Casa de las Águilas”, “Sacrificios de consagración en la Pirámide de la Luna”, “Humo aromático para los dioses” y “Nuestra sangre, nuestro color: la escultura polícroma de Tenochtitlan” en el Museo del Templo Mayor.

Su obra ha sido traducida al inglés, francés, italiano, alemán, rumano, japonés y chino. Es autor de más de dieciséis libros y sus publicaciones periódicas rebasan los doscientos artículos; también ha coordinado dieciocho volúmenes colectivos. Entre sus obras más recientes destacan Escultura monumental mexica (2009), con Eduardo Matos Moctezuma; Monte Sagrado-Templo Mayor (2009), con Alfredo López Austin; El capitán Guillermo Dupaix y su álbum arqueológico de 1794 (2015); Arqueología de la arqueología (2017); El ídolo sin pies ni cabeza. La Coatlicue a fines del México virreinal (2020) y Los muertos viven, los vivos matan. Mictlantecuhtli en el recinto sagrado de Tenochtitlan (2021). Buena parte de estas publicaciones están disponibles en formato electrónico en la página www.mesoweb.com/about/leonardo.html

Ha recibido numerosas distinciones, entre ellas, el Premio de Humanidades Eugene Kayden de la Universidad de Colorado en 1991; los Premios 1992, 1996 y 2007 del Comité Mexicano de Ciencias Históricas; el Premio Choice 1994, de la Asociación Americana de Bibliotecas; el Premio Alfonso Caso 1998 y 2016, del INAH; el Premio de Investigación en Ciencias Sociales 2000, de la Academia Mexicana de Ciencias y el Premio del Foro Arqueológico de Shanghái 2015, de la Academia China de Ciencias Sociales por dirigir uno de los diez mejores proyectos de investigación a nivel mundial de los tres últimos años; las becas Guggenheim de Nueva York, Dumbarton Oaks de Washington y del Instituto de Estudios Avanzados de París, así como la Medalla al Mérito 2016, del Festival del Centro Histórico de la Ciudad de México.

De 2003 a 2005, fue secretario general de la Sociedad Mexicana de Antropología y desde 1999 funge como miembro del consejo de administración de la Sociedad de Americanistas de Francia. En la actualidad es nivel III del Sistema Nacional de Investigadores, miembro regular de la Academia Mexicana de Ciencias, miembro de número de la Academia Mexicana de la Historia, miembro honorario del Colegio Profesional de Antropólogos de Lima, miembro correspondiente de la Academia Británica y miembro honorario de la Sociedad de Anticuario de Londres. En 2022, la Academia Americana de Artes y Ciencias lo nombró miembro honorario internacional.

Leonardo Náuhmitl López Luján ingresó a El Colegio Nacional el 15 de marzo de 2019. Su discurso “Pretérito pluscuamperfecto. Visiones mesoamericanas de los vestigios arqueológicos” fue contestado por Eduardo Matos Moctezuma.

Pretérito pluscuamperfecto
Visiones mesoamericanas de los vestigios arqueológicos

Egiptomanía romana

Nunca he comprendido por qué mi hermano no se convirtió en marino para consagrar su existencia a surcar océanos. ¿Cómo logró escapar a ese destino si, en la España de los estertores del franquismo, acudía él, domingo a domingo, a la muy sevillana Plaza de Santa Marta para comprar timbres de carabelas, goletas y buques de vapor? Yo lo acompañaba y, para emular a mi mayor, buscaba cuanta estampilla tuviera imágenes de pirámides, esfinges o sarcófagos, señal inequívoca de la dulce condena de mi porvenir, de una vocación que –alentada por mis padres— desembocaría en mi hoy y mi mañana. Al redactar estas líneas, paso las hojas de mi premonitorio álbum de filatelia y constato que mi perseverancia no dejó en aquellos días un solo espacio vacío. Noto también la presencia de la vieja serie de la Posta Aérea Vaticana dedicada a los obeliscos de Roma (fig. 1).

 


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