ECN | 22 octubre 2018
Desigualdad y mujer
●Seguimos discutiendo el tema de la desigualdad y la mujer porque es una de las cuestiones que más preocupa a El Colegio Nacional como institución educativa y a este país: Vicente Quirarte
●Frente a la ecuación de la desigualdad la lucha debe de ser entre disímiles y con reciprocidad: Marisa Belausteguigoitia
●La situación de desventaja coloca a la mujeres en la necesidad de rivalizar entre ellas para poder sobrevivir en un mundo por y para hombres: Verónica Corona
●No tenemos en México una vida libre de violencia, tampoco hemos logrado que se vea a la mujer como un ser humano total: Claudia Domínguez
Desigualdad y mujer fue el nombre de la mesa de clausura del 3er Encuentro Libertad por el Saber, organizado por El Colegio Nacional (ECN) con el fin de diagnosticar, analizar y proponer soluciones a los principales problemas de México. La mesa estuvo moderada y coordinada por el colegiado Vicente Quirarte, quien introdujo al tema diciendo que “la misión de El Colegio Nacional es preguntarse qué sucede en el país. El Colegio está para enfrentar los problemas y analizarlos como entidad educativa, de eso se trata. El Colegio Nacional está para subrayar la identidad nacional y fortalecer la conciencia de la nación”.
Marisa Belausteguigoitia, investigadora de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM, comenzó mostrando su repudio a los grupos porriles de esta institucióny posteriormente presentó la ponencia Escribir el cuerpo, representar el deseo, la notaría del deseo en donde habló de las mujeres presas y su lucha diaria en contra de la desigualdad: “Lo que les vengo a decir es lo que tenemos que hacer para aparecernos y hacernos presentes en cuerpo y palabra en estos momentos tan difíciles para el país”.
La académica compartió los resultados del programa Mujeres en espiral. Sistema de justicia, perspectiva de género y pedagogías en resistencia que trabaja con mujeres encarceladas por medio del arte con el fin de cultivar la reciprocidad y el reconocimiento del otro entre universitarios y las mujeres de penal de Santa Martha Acatitla. “Lo que buscamos es promover un ejercicio de co-incidencia con los diferentes para dar ciudadanía y el poder (…) El contacto inesperado entre cárcel y universidad genera un aprendizaje inusual a partir del encuentro incómodo con el otro, lo que conocemos como alteridad”, afirmó Belausteguigoitia.
Después fue el turno de Verónica Corona, dirigente de la organización Mujeres en Pacificación Sororal, A. C. quien llamó a su ponencia Fuego Amigo y en ella analizó la desigualdad y discriminación que las mujeres ejercen contra otras mujeres y para tal fin explicó conceptos como el de sororidad, pensamiento heterosexual e introyecto y citó a distintas feministas como Simone de Beauvoir, Franca Basaglia, Marcela Lagarde, Martha Lamas, Rosario Castellanos, Carol Gilligan y Graciela Hierro.
La psicóloga propuso el término de ginomisoginia para referirse al odio de mujeres hacia mujeres y explicó el efecto revertido para la propia mujer que ejerce esa violencia: “La división de las mujeres se realiza por mandatos binarios morales, estéticos o de estigmas. La necesidad de tener un lugar en el mundo de los hombres hace que la rivalidad sea una constante inconsciente entre las mujeres (…) Esta rivalidad se transforma en el ejercicio de la violencia, la segregación, la denigración, la burla o la exclusión dirigida a la o las que se perciban como amenazadoras o rivales”. Finalizó exhortando a la rebeldía de las mujeres y asegurando que la primera desigualdad que se debe de abolir es la que se ejerce de una mujer a otra por medio de la revisión de las relaciones familiares.
La última ponente de la jornada fue la académica de la UAM-Iztapalapa, Claudia Domínguez quien se centró en la revisión de la obra de la escritora española María de Zayas Sotomayor. Confirmó que la obra de Zayas se divide en dos colecciones (Maravillas y Desengaños) y comentó que “María de Zayas, cuando las mujeres no eran consideradas inteligentes, quiso hablar sobre las capacidades que tenemos como seres humanos pensantes femeninos capaces de decir y dar un mensaje”.
La ponente afirmó que la colección de Maravillas tenía como objetivo deleitar al público y dar un mensaje didáctico a favor de las mujeres usando la fórmula de los textos enmarcados y para ejemplificar citó la novela de El prevenido engañado. Por su parte, en la colección de Desengaños se narran casos verdaderos que tenían como objetivo advertir a las mujeres sobre los engaños de los hombres y analizó la novela de La inocencia castigada en donde se muestran a personajes femeninos subordinados a las costumbres y valores de una cultura violenta con las mujeres. Finalizó al decir que “no tenemos en México una vida libre de violencia, tampoco hemos logrado que se vea a la mujer como un ser humano total. Tenemos mucho que hacer y no podemos dejar que las autoridades y los políticos sean los responsables, nosotros como sociedad tenemos que estar enterados y tener una opinión propia de lo que sucede”.
Puede consultar la actividad completa en el canal de YouTube de El Colegio Nacional: https://www.youtube.
