Biotecnología: Organismos transgénicos, sus grandes beneficios y la ausencia de daño

• El uso de los transgénicos nos permite contender con problemas como el de la contaminación y el cambio climático, y otras demandas específicas como la sustentabilidad alimentaria: Bolívar Zapata

Francisco G. Bolívar Zapata, miembro de El Colegio Nacional (ECN), impartió el día de hoy en esta institución la conferencia Organismos Transgénicos, sus grandes beneficios y ausencia de daño. En la conferencia, el bioquímico e investigador defendió la utilización y el desarrollo de los organismos genéticamente modificados (OGM). “Los biotecnólogos estamos muy preocupados porque se sigue denostando a la biotecnología y específicamente a los transgénicos”, confesó Bolívar Zapata, “y la realidad es que el uso de los transgénicos nos permite contender con problemas como el de la contaminación y el cambio climático, y otras demandas específicas como la sustentabilidad alimentaria”.

El bioquímico explicó que los organismos transgénicos son animales o vegetales cuya dotación genética ha sido modificada para contener un gen adicional y sus descendientes heredan este gen del mismo modo que los propios. Un organismo transgénico se consigue tras incorporar el gen ajeno en las células embrionarias que se generan en los primeros estadios del desarrollo. El gen inyectado se integra en el ADN de la célula huésped, en el cromosoma, y se transmite a todas las células originadas a partir de ella. Por tanto, está presente en todas las células del organismo adulto resultante y en las de sus descendientes. “Podemos construir los organismos transgénicos, porque el material genético o ADN tiene la misma estructura general en todos los seres vivos, desde las bacterias hasta los humanos”, especificó Bolívar Zapata, que también detalló que un transgen es igual que cualquier otro gen desde el punto de vista químico y biológico. “La transferencia horizontal del ADN ocurre de forma natural en la biota”, prosiguió el bioquímico, “y los virus y bacterias son vectores. El genoma humano contiene 145 genes de origen bacteriano. Son parte de nuestros cromosomas, no están aislados”.

El investigador también profundizó en la utilización de la innovadora técnica CRISPR-Cas9, una herramienta capaz de corregir el genoma, permitiendo cortar a voluntad en la secuencia de ADN y reemplazar el fragmento extraído por otro previamente seleccionado. 

Según Bolívar Zapata, los beneficios del uso de los transgénicos se han demostrado en tres sectores importantes para el ser humano. En primer lugar, dando lugar a vacunas y medicamentos, como por ejemplo la insulina, los anticoagulantes o el interferón, el cual impide la multiplicación de las células cancerosas y puede retardar el crecimiento de un tumor. El sector alimentario también ha mejorado con el uso de transgénicos como la quimosina o las pectinas, entre otras, fundamentales para procesar los alimentos. Y por último, en el sector agrícola, donde el uso de las plantas transgénicas ha motivado una mejora de las cosechas y una disminución de los costos de producción al lograr evitar el uso de pesticidas y herbicidas químicos, además de reducir la emisión de dióxido de carbono provocada por los tractores de fumigación.

En un meta análisis de impacto basado en 147 estudios mundiales realizado por la Universidad de Göttingen (Alemania), se demostró que la adopción de la biotecnología en la agricultura ha reducido en un 37% el uso de pesticidas químicos, ha incrementado en un 22% la productividad de las cosechas y ha incrementado las ganancias de los agricultores en un 68%, por dejar de comprar los insecticidas.

Bolívar Zapata también habló de la existencia de suficiente evidencia científica sólida de que los transgénicos son organismos de bajo riesgo, y que sus productos se utilizan desde hace años sin perjuicio a la salud ni efectos negativos para el medio ambiente. “Se cuenta con un conjunto superior a 2000 publicaciones científicas realizadas en diferentes laboratorios del mundo sobre la inocuidad, ausencia de daño, seguridad y los efectos de los OGM en la salud, que ratifican que la biotecnología, y en particular los transgénicos, no son per se más riesgosos que las técnicas de mejoramiento convencional”, detalló el miembro de ECN. Entre los reportes más importantes que acreditan el uso de los OGM están los de la Comisión Europea, la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS) y la Royal Society británica.

Actualmente, gracias al Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) y los Protocolo sobre la Seguridad de la Biotecnología de Cartagena y Nagoya-Kuala Lumpur, existe un marco jurídico internacional que regula y se encarga de evaluar los efectos adversos en la biodiversidad y movimientos transfronterizos de los OGM. En México es la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM) la que regulariza los transgénicos por medio de agencias como CIBIOGEM y COFEPRIS.