Colnal | 1 abril 2019
CERRADO (Imágenes trabajando) | Clausura de la exposición
- Las ciudades son los edificios, pero también, y sobre todo, son las historias y las personas: Juan Villoro
- Hay algo de desobediente y, por lo tanto, de poético en pintar algo que está hecho para esconder: Adrián Chávez
- Esta muestra se trata de representaciones, de representaciones, de rostros de la calle. Al colgarse de las paredes, fuera de su medio natural, las imágenes se hacen declarativas: Luisa Reyes Retana
- Con sus propios códigos el arte urbano transmite información y le otorga vigencia al pasado: Aldo Valdés
- La Ciudad de México se va develando como capa de cebolla: Mardonio Carballo
La exposición CERRADO (Imágenes trabajando) del fotógrafo Héctor González Jiménez y coordinada por el integrante de El Colegio Nacional (Colnal), Juan Villoro, fue clausurada este lunes con una ceremonia en la que participaron los escritores Adrián Chávez, Luisa Reyes Retana, Aldo Valdés y Mardonio Carballo. A manera de introducción, Villoro aclaró que la exposición retrata los grafitis que se encuentran en las cortinas de metal de los comercios de la calle 20 de noviembre y que se realizaron a iniciativa del Fideicomiso del Centro Histórico: “es una exposición que trabaja en varios registros, es una muestra del grafiti en México, del arte urbano y muchas veces alude a circunstancia iconográficas de la cultura popular mexicana”.
El colegiado narró cómo conoció al fotógrafo autor de la exposición en el metro de la Ciudad de México y lo definió como un conocedor de la ciudad y, en específico, de la zona del centro. Villoro puntualizó que para la realización de la exposición participaron varias personas como Vivian Cárdenas, Alejandro García Lagarda, Marcela Marcos y Jorge Moreno. Al final de su participación, Villoro reflexionó sobre la constantes pérdidas que sufre la ciudad y la posible eliminación de los grafitis de las cortinas, pero señaló que las fotografías de González Jiménez quedan como registro: “esta ciudad de capas múltiples es una ciudad que ha cambiado con el tiempo, pero que nosotros vamos conservando en la memoria. Tenemos la ciudad que existe y la ciudad de nuestros recuerdos”.
El primero en comentar la exposición fue Adrián Chávez, quien leyó el texto Formas de ser mirada en donde reflexionó sobre el trabajo que hizo González Jiménez al tomar las fotografías que conforman la exposición, y la forma en la que el espectador también es mirado por los personajes de los grafitis. En este sentido, el escritor puntualizó que la exposición tiene dos formas de recorrerla: la primera que se basa en los rostros de mujeres y la segunda que se conforma por la reproducción de iconografías populares: “al elegir y destilar sus símbolos los artistas crean su versión de qui´rnes somos, pues la adaptación y la copia son en sí una declaración de principios”.
Posteriormente, Aldo Valdés y Luisa Reyes Retana, leyeron en conjunto el texto Esta es la calle. Reyes Retana se centró en la relación del arte y la calle, señaló a la indelebilidad y la burla como características del arte callejero e hizo una crítica de los grafitis de las cortinas: “los callejeros prefieren acrónimos, apodos, nombres de calle, quizá porque hacen eco a los procesos de producción. Su trabajo sucede en la penumbras, en las esquinas, a espaldas de la autoridad. Nadie lo remunera. Está entre el delito y el beneplácito dependiendo de los gustos de la alcaldía (…) Para mi gusto hay demasiadas niñas frágiles con miradas soñadoras, pero el imaginario es lo que es y solo lo cambian las revoluciones como la que vivimos en tiempo presente y atañe a la idea de mujer que, de llegar a buen puerto, es probable que algun dia pinte rostros más realistas en las cortinas de 20 de noviembre”.
Por su parte, Valdés destacó el papel que juega el lenguaje urbano como herramienta de relación con el espacio público y como forma de expresión democrática: “con sus propios códigos el arte urbano transmite información y le otorga vigencia al pasado (…) en este tipo de exhibiciones no suele haber intermediarios ni filtros debido a la horizontalidad del arte urbano”. En este sentido, Reyes Retana cerró la lectura al decir que “en la implacable presencia de la calle, ahora en la presencia de este patio, somo testigos de la realidad dialogante que es inherente de la Ciudad de México, donde lo más improbable sucede. En la calle las historias se encuentran, se hacen los amigos y se encuentran los destinos”.
Por último, Villoro presentó al poeta náhuatl, Mardonio Carballo, de quien destacó su trabajo como activista, comunicador y escritor. Carballo, por su parte, declamó una retahíla que escribió después de ver la exposición, “(…) son las imágenes de un recorrido que hoy cierra, que hoy está cerrando, que hoy está clausurando y que hoy les invita a todos ustedes a posar la mirada sobre la mirada sobre la mirada sobre la mirada, porque al final la Ciudad de México se va develando como capa de cebolla (…) hoy la Ciudad de México no es más el ayer y a final de cuentas es posar la lente del fotógrafo y hacer que ese fotógrafo nos cuente la historia de otra mirada y otra sensibilidad”.
Al final de la presentación hubo una convivencia con el fotógrafo autor de la exposición, Héctor González Jiménez.
Puede consultar la actividad completa en el canal de YouTube de El Colegio Nacional: https://www.youtube.
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